REFLEXIONES
Hoy en día la profesión docente está sometida a numerosas exigencias por parte de la sociedad mexicana, que hacen que el magisterio constantemente tenga que actualizarse para brindar una educación de calidad.
Todo evoluciona, principalmente las tecnologías, por lo tanto, el magisterio tendrá que hacerlo también; sin embargo, no estoy de acuerdo de que los medios de comunicación hayan cambiado la forma de ver al docente pues se han encargado de denigrar la figura del "maestro", de hacernos ver como los villanos de la película y esto a futuro trae como consecuencia menos respeto = a menos disciplina = a menos conocimiento = a ciudadanos con más carencias y menos valores.
Se pierde pues la figura, el ejemplo a seguir.
Por lo tanto la educación aquí en México es muy compleja y desafiante. Sus maestros a lo largo de la historia han logrado enaltecerla, por lo cual nuestra tarea actual es aún más relevante.
por Hernán de Luna Mora, 2015
Reflexiones personales
¿Alguna vez sentiste temor al entrar a un grupo? ¿Haz sido capaz de controlar la indisciplina de 44 alumnos o más? ¿Se te han presentado diferentes problemas en clase? ¿Haz enfrentado los problemas o simplemente los has dejado pasar? ¿Se te ha dificultado algún contenido? ¿Puedes atraer la atención de tus alumnos sin perderla? ¿Haz aprendido a dar clases durante tu proceso de enseñanza?
Si alguna vez te planteaste estas preguntas durante tu formación docente, entonces mi ensayo te va ha interesar, no tengo mucha experiencia dentro del campo educativo pero si te puedo decir que he tenido suerte en las diferentes escuelas secundarias a las que he visitado. Digo suerte, porque en mi primera práctica no resulte herido o lastimado, al contrario salí con la cara muy en alto pero todavía un poco asustado, y esto porque los primeros 10 minutos temblaba peor que un perro golpeado por su dueño, mi garganta se cerraba como si fuera un pequeño conejo moribundo apresado en los colmillos de un rabioso oso, y el sonido de mi corazón era parecido al bombo de una orquesta, y esto que me ocurría no lo comprendía del todo en esos instantes, pero de repente algo extraño sucedió en mi y todo se empezó a esclarecer, ya que comencé a sentir una fuerza interior que me impulsaba a seguir, y así fue, la atención de los alumnos del primer grado me habían brindado seguridad y me habían revivido, pero no contaba con el dominio del contenido que de hecho lo llevaba memorizado, tartamudeé un poco y suprimí algo de la información sin querer, en esos momentos voltee a mi alrededor para observar las expresiones de mis compañeros que entraron al salón para observar mi desenvolvimiento dentro del aula, y pude notar que me había equivocado por sus expresiones en sus rostros, ellos me desmotivaron un poco pero no me di por vencido, continué con mi clase y la termine, reconozco que no fue la mejor clase que he dado pero si creo que fue la que más experiencias me ha dejado, ahí comprendí que en un grupo hay de 10 a 50 personas y que todos piensan y aprenden diferente, que como docente debo de documentarme para enseñar adecuadamente, que debo de planear mi clase de acuerdo a las necesidades de un grupo, que hay reglas que se deben de respetar, y que la escuela misma las tiene para brindar una mejor calidad educativa.
Mi primera experiencia me fortaleció demasiado en cuanto a ir formando una personalidad docente, a observar un poco más, a no tener una simple visión de lo que puede ser una clase, por lo que hasta el contexto puede ser pieza clave para mejorar el rendimiento del grupo; todo influye: familia, amistades, escuela, medios masivos de comunicación. Por lo que es necesario ir bien preparado al aula y tener conocimiento de la asignatura (contenidos) que se va a impartir, de los alumnos con los que se va a trabajar (qué les gusta de la clase?, ¿qué les disgusta?, ¿Cuáles son sus ideales?), para adecuar la planeación a las necesidades del grupo, ya que esto nos dará una mejor conducción de las actividades y mejor manejo del tiempo, además hay que tener en cuenta como apoyo el uso correcto del libro de texto y el cuaderno de clases, porque sencillamente son dos herramientas que nos pueden ayudar a verificar si realmente se está trabajando; claro no hay que olvidar material didáctico (láminas, fotocopias, biografías, etc.) y recursos con los que cuente la escuela (cañón, proyector de acetatos, computadoras, biblioteca salón de usos múltiples, etc), para hacer la clase más llamativa y menos monótona.
Es importante que como buenos “docentes” lo primero que se tiene que hacer es plantearse ¿hasta donde quiero llegar?, ¿qué quiero transmitir?, ¿Cuáles son los objetivos que deseo alcanzar?; estas son preguntas que en cierta manera nos ayudaran a encontrar el significado de ser maestro por deseo y no sólo por adquirir un trabajo. Por lo tanto el quehacer docente es muy variado y muy difícil si éste no cuenta con herramientas que respalden su trabajo, ya que debe ser capaz de transmitir conocimientos, valores, actitudes, con base a su capacidad para comunicarse eficazmente con sus estudiantes. Además dentro de la institución cada docente tiene una comisión (círculo de lectores, o alfabetización) que tendrá que cumplir con la finalidad de fortalecer la enseñanza-aprendizaje del dicente.
Esta claro que dependiendo la modalidad de la institución va ser el trabajo del docente ya sea menor o mayor, ya que un maestro en una telesecundaria puede tener mucho más trabajo que uno que esta en una escuela general o técnica, por el hecho de que no existe tanto personal en la institución, así que terminan haciéndole a director, maestro e intendente al mismo tiempo.
Lo interesante es que durante mi formación como docente he logrado conocer diferentes grupos e instituciones que han fortalecido mi interés por estar más preparado (documentación), consecuencia que a forjado en mí conocimientos para dar una clase de diferentes formas, controlar al grupo, dominar tiempos, poner en práctica dinámicas, promover un ambiente ameno, identificar alumnos introvertidos e extrovertidos así como estudiantes con lento aprendizaje por medio de la observación, planear de acuerdo al enfoque del español (comunicativo-funcional), y conocer a la institución y sus diferentes herramientas. Esto básicamente me ha hecho comprender que la labor docente es una difícil y gran responsabilidad, que no cualquier individuo asumiría; por esta razón aprecio los buenos resultados de los conocimientos que los alumnos adquieren y que yo mismo adquiero junto con ellos, además de que el grupo se sienta a gusto con mi labor, pero sobre todo aprecio mi formación docente (conocimientos obtenidos).
Aunque he tenido conflictos dentro del aula, como: falta de interés, indisciplina, peleas entre estudiantes, falta de entendimiento en las actividades que propongo, problemas personales de algunos alumnos, e intervenciones de mi clase de otros docentes; de los cuales los que me han representado mayor problema han sido la falta de interés y la indisciplina, y esto básicamente por la falta de estrategias para atraer la atención y por no dominar los contenidos, lo importante es que he aprendido a ser más firme en mis decisiones y no tan voluble, ya que a veces no tenía el carácter suficiente para enfrentar situaciones que se daban en el aula, de hecho cuando se me hacía una pregunta por parte de un alumno prefería evitarla dejándolo con la duda o con el error, por ello mi decisión de cambiar mi actitud con el fin de hacer respetar mis reglas para que funcione lo planeado.
Actualmente he adquirido un compromiso y una responsabilidad social que no es del toda sencilla, pero que esta llena de experiencias y motivaciones que darán frutos grandiosos en la educación de mis dicentes. Esta claro que la educación de ahora requiere de mayor atención, ya que la tecnología no se detiene y la evolución del hombre en cuanto a conocimientos es cada vez es mayor.
Ya por último para mí en lo personal el significado de enseñar, es encaminar al alumno a la adquisición de los conocimientos. Que en cierta forma ya los tienen (conocimientos), el problema es sólo poder desarrollarlos y eso si es difícil, si realmente no tenemos el entusiasmo de querer enseñar y de querer aprender, por lo que nuestra responsabilidad como docentes, es mostrarles a los alumnos en base a estrategias, juegos, recursos, e inclusive con ejemplos reales la forma mas divertida de aprender, para que ellos desarrollen sus capacidades y habilidades personales, que harán de ellos personas competentes. Por lo tanto mi principal objetivo es motivar a los alumnos para que salgan adelante en un futuro que no les será muy lejano y además para que sean personas dignas de reconocer en cualquier parte de México y del mundo, y esto compañeros maestros lo vamos a lograr si nosotros como docentes les mostramos el sendero de las oportunidades, siempre y cuando busquemos la mejor forma para que comprendan los alumnos de que si se puede realizar cualquier sueño que por muy lejano que se vea, la clave siempre va a estar en el esfuerzo y en el de no dejarse vencer por pequeños obstáculos que se nos puedan a atravesar en el camino, ¡luchen por sus ideales! Y no hagan caso omiso a mis palabras. ¿O será que la educación en Aguascalientes seguirá siendo deficiente aunque muchos maestros se esfuercen por mejorarla? ¿O simplemente habrá más egresados sin futuro?
Reflexión 2
Agradezco esa oportunidad con estos chicos pues ellos me hicieron ser quien soy ahorita.
por Hernán de Luna Mora, 2015
Reflexión 2
¿En qué medida invitan las evaluaciones revisadas en el ejercicio anterior a reflexionar e interactuar al alumno, maestro y a fortalecer el aprendizaje?
La evaluación es un instrumento indispensable en la educación que nos permitirá tomar decisiones oportunamente; además no dará una visión clara de los errores para posteriormente corregir los posibles obstáculos de manera sistemática y continua.
Así mismo, la evaluación maneja tres momentos los cuales son: la diagnóstica, la formativa y la sumativa.
La evaluación es importante en el quehacer docente, pues al iniciar ciclo escolar se aplica un diagnóstico que nos permite visualizar habilidades, conocimientos, competencias, que algunos alumnos ya poseen o que les hace falta poseer. Esta evaluación nos permitirá reorganizar el programa y proponer objetivos de aprendizaje (diagnóstica).
Ya en el transcurso de nuestro quehacer cotidiano se sigue el ritmo de aprendizaje del alumno a fin de poder proporcionarle asistencia pedagógica precisa (al alumno que lo necesite), con el cual detectaremos posibles desajustes entre lo que se enseña y lo que se aprende, esto nos permitirá valorar avances (formativa).
Relevante este momento de evaluación, pues nos permite actuar de manera inmediata y retroalimentar el trabajo desarrollado a lo largo del ciclo escolar, puesto que con ella ajustamos.
Ya al final de un curso o del mismo ciclo escolar identificamos la consecución de los objetivos propuestos así como la integración de conocimientos, capacidades y habilidades (sumativa).
Estos tres momentos de evaluación se van complementando a lo largo del ciclo escolar con una evaluación continua (en cada actividad, observando, reflexionando progresos), congruente (con los propósitos, estrategias, actividades e instrumentos), global (considerar aspectos interdisciplinarios y transversalidad), diversificación (distintos estilos de aprendizaje y maneras de evaluar) e integradora (tienen presente los objetivos establecidos en el ciclo escolar).
Los diferentes tipos de evaluación provocan una dinámica proactiva entre alumnos y maestros pues nos permite a ambos actores direccionar nuestro camino en el ámbito de la educación de una forma integral. Esto nos permitirá mostrar resultados verídicos de lo que hemos obtenido al inicio, durante y al final de un ciclo escolar.
En lo personal evaluar no es sencillo hay que contar con instrumentos que nos permitan realmente dar una idea clara de lo que el alumno ha obtenido durante un proceso, para esto es importante tener evidencias que nos permita demostrar en qué aprendizajes esperados los alumnos han obtenidos resultados favorables y en cuáles se necesitarán fortalecer; por lo tanto recomiendo la utilidad de un portafolio con evidencias por alumno que nos guie a conseguir los objetivos propuestos al inicio, durante y al final de un ciclo escolar; aunado a esto es de vital relevancia usar la autoevaluación y coevaluación con listas de cotejo y rúbricas pero con responsabilidad y honestidad pues les permitirá valorar qué tanto se avanzó en ciertos temas y aprendizajes esperados.
Por lo tanto el docente es el encargado de la evaluación de los aprendizajes de los alumnos y es quien realizará un seguimiento, creará oportunidades para aprender y hará modificaciones.
Por último cabe mencionar que hay que tener en cuenta que la evaluación no sólo compete al docente sino a los estudiantes, padres de familia y autoridades educativas, que en su conjunto brindarán una educación de calidad, por lo tanto es responsabilidad de todos: conocer lo que se espera aprender.
por Hernán de Luna Mora, 2015
REFLEXIÓN 3
La pertinencia de las técnicas e instrumentos de evaluación donde se destaque de qué manera y en qué momentos pueden ser utilizadas para favorecer el proceso de evaluación.
En la actualidad la evaluación se basa en los planes y programas de estudio, pues en ellos se pone énfasis en los diversos momentos que tiene el alumno en el proceso de desarrollo del aprendizaje. En dicho desarrollo del aprendizaje, la evaluación formativa implica un proceso permanente y continuo, el cual se lleva a cabo en cada etapa del trabajo escolar una vinculación con las acciones de aprendizaje, en el que el docente tiene que desarrollar instrumentos que le permitan verificar el logro de los aprendizajes esperados y registrar sistemáticamente el desarrollo que muestra cada alumno en su proceso de aprendizaje, mismo que adquiere sentido cuando es relacionado con situaciones del contexto donde el estudiante se desenvuelve.
Por lo tanto, evaluar de manera continua equivale a utilizar técnicas e instrumentos de evaluación como:
Técnicas de observación son aquellas que permiten evaluar los procesos de aprendizaje en el momento que se producen, con éstas se pueden advertir conocimientos, habilidades, valores y como los utilizan los alumnos en una situación determinada; algunos de los instrumentos que se puede utilizar son:
Guía de observación: instrumento que se basa en una lista de indicadores que se pueden redactar como afirmaciones o preguntas, que orientan el trabajo de observación dentro del aula.
Registro anecdótico: es un informe que describe hechos, sucesos o situaciones concretas que se consideran importantes para el alumno o el grupo y da cuenta de sus comportamientos, actitudes, intereses o procedimientos.
Diario de clase: es un registro individual donde cada alumno plasma su experiencia personal en las diferentes actividades que ha realizado ya sea durante una secuencia de aprendizaje, un bloque o un ciclo escolar.
Diario de trabajo: instrumento para recopilar información que elabora el docente en el cual se registra una narración breve de la jornada y de hechos y situaciones escolares que hayan influido en el desarrollo del trabajo.
Escala de actitudes: es una lista de enunciados y frases seleccionadas para medir una actitud personal (positiva, negativa o neutral) ante otras personas, objetos o situaciones.
Técnicas de desempeño de los alumnos son aquellas que requieren que el alumno responda o realice una tarea que demuestre su aprendizaje de una determinada situación; algunos de los instrumentos que se puede utilizar son:
Preguntas sobre el procedimiento: tienen la finalidad de obtener información de los alumnos, acerca de la apropiación y comprensión de conceptos, procedimientos, y la reflexión de la experiencia.
Cuadernos de los alumnos: son instrumentos de evaluación que permiten hacer un seguimiento del desempeño de los alumnos y de los docentes. Son un medio de comunicación entre la familia y la escuela.
Organizadores gráficos: Es una representación visual que comunica una estructura lógica de un contenido. Los organizadores pueden utilizarse en cualquier momento del proceso de enseñanza.
Técnicas del análisis del desempeño, algunos de los instrumentos que se puede utilizar son:
Portafolio: Es un concentrado de evidencias estructuradas que permiten obtener información valiosa del desempeño de los alumnos, a lo largo de una secuencia, un bloque o un ciclo escolar.
Rúbrica: es un instrumento de evaluación con base en una serie de indicadores que permiten ubicar el grado de desarrollo de los conocimientos, habilidades y actitudes o valores en una escala determinada.
Lista de cotejo: es una lista de palabras, frases u oraciones que señalan con precisión las tareas, acciones, procesos y actitudes que se desean evaluar.
Técnicas de interrogatorio son instrumentos útiles para valorar la comprensión, apropiación, interpretación, explicación y formulación de argumento de diferentes contenidos de las distintas asignaturas. Algunos de los instrumentos que se puede utilizar son:
Tipos textuales (debate y ensayo) orales y escritos (pruebas escritas): son instrumentos útiles para valorar la comprensión, apropiación, interpretación, explicación y formulación de argumentos de diferentes contenidos de las distintas asignaturas.
La aplicabilidad pertinente de las técnicas (procedimientos utilizados por el docente para obtener información acerca del aprendizaje de los alumnos) y sus instrumentos (recursos diseñados para fines específicos) nos permitirán obtener una evaluación eficaz y real de lo que el alumno desarrollará en cuanto a competencias y lo que deberá aprender (aprendizajes esperados) a lo largo del ciclo escolar.
Hay que tomar en cuenta que las técnicas como los instrumentos deberán de adaptarse a las características de los alumnos y que deberemos de utilizar aquell@s que nos permitan obtener la información que se desea.
Por lo que el docente tendrá que observar, analizar y valorar las producciones de los alumnos para evaluarlos y así obtener información de su proceso de aprendizaje con base a dichas técnicas e instrumentos.
En lo personal, cuando evalúo un proyecto hago uso la técnica del análisis del desempeño en la cual uso los siguientes instrumentos: rúbricas, escalas de rango, listas de cotejo y portafolio, que me han facilitado obtener resultados cuantitativos y cualitativos reales de acuerdo a la consecución de aprendizajes esperados y el desarrollo de competencias específicas según el plan y programas de español, permitiendo el fortalecimiento de los mismos.
Las rúbricas, las listas de cotejo y escalas de rango las uso específicamente en la heteroevaluación de los productos elaborados en cada proyecto e incluso estos mismos instrumentos son utilizados cuando los alumnos se autoevalúan y coevalúan sus propias producciones así como en la aplicación de las actividades desarrolladas al inicio, desarrollo y cierre de la clase, pero siempre con responsabilidad y honestidad pues en cierta forma les permitirán valorar qué tanto avanzaron en los temas y aprendizajes esperados.
En cuanto al portafolio sólo lo uso para analizar avances y retrocesos, ya que me permite verificar en qué aprendizajes esperados y temas los alumnos han obtenido resultados favorables y en cuáles necesitaré reforzarles; con este instrumento los dicentes recopilarán sus producciones, mismas que servirán de evidencias y de autoevaluación.
Otra de las técnicas que más utilizo es la del desempeño de los alumnos, en la cual uso los siguientes instrumentos: cuadernos y organizadores gráficos. En lo que se refiere el manejo de cuadernos pues simplemente lo empleamos para llevar un seguimiento cuantitativo y cualitativo de forma permanente, pues registran actividades, ejercicios, borradores, etc. Los organizadores gráficos (mapa conceptual, cuadro sinóptico) los manejamos (alumnos-docente) frecuentemente para organizar información de manera jerárquica estableciendo relaciones de inclusión entre las ideas; incluso ya en lo personal los aplico para retroalimentar o cerrar sesiones.
Otra técnica que empleo constantemente es la de interrogatorio pues mi asignatura es la de español, en la que utilizo instrumentos de tipo textual como el debate y el ensayo que están dentro del plan y programa de estudio específicamente en las prácticas sociales del lenguaje.
Cabe mencionar que todas las técnicas y sus respectivos instrumentos nos ayudarán proactivamente tanto a maestros como alumnos en una mejora para la evaluación formativa.
por Hernán de Luna Mora, 2015
REFLEXIÓN 4
La evaluación de los momentos de la secuencia didáctica
La planeación es un proceso fundamental en el ejercicio docente, que contribuye a orientar su intervención hacia el logro de aprendizajes esperados y al desarrollo de competencias. Al planear debemos de considerar las características de los alumnos, el entorno escolar y social, las estrategias, los materiales, el tiempo, los instrumentos de evaluación que permitirán evidencias de los aprendizajes; así mismo deberemos considerar: qué comprenderán primero y qué después para lograr los aprendizajes.
Está conformada por un conjunto de secuencias didácticas que contemplan actividades de inicio, desarrollo y cierre; así como de una evaluación diagnóstica (inicio), formativa (durante) y sumativa (final), que deben confluir, con la finalidad de acercar al estudiante al logro de los aprendizajes esperados. Así pues la evaluación debe estar inmersa en el proceso de enseñanza-aprendizaje, con el propósito de mejorar el desempeño de los alumnos.
Por lo tanto será importante considerar la evaluación en cada secuencia didáctica.
El proceso de evaluación deberá de cumplir con cuatro pasos básicos: recopilación de datos a partir de la observación u obtención de evidencias; análisis de la información obtenida en función del referente de evaluación, y formular conclusiones; establecimiento de un juicio de valor acerca del aprendizaje y compartirlo con el alumno para detonar o mejorar las estrategias de aprendizaje; establecimiento de un juicio de valor acerca de las estrategias de enseñanza y adecuarla para lograr mejores resultados.
La evaluación que apliquemos en la enseñanza-aprendizaje consistirá en un proceso sistemático en el que obtendremos datos, los cuales podremos disponer de ellos de manera continua y significativa para conocer la situación; además de que podamos crear juicios de valor que nos permitan tomar decisiones adecuadas que nos ayudarán a mejorarla progresivamente.
La evaluación al inicio de la secuencia didáctica: es decisiva para interesar a los alumnos en el aprendizaje; en esta fase es necesario comunicar lo que se espera que se aprenda, cómo lo lograrán y para qué les servirá; así mismo será importante explicar cuáles serán las actividades, qué resultados o productos se obtendrán, cómo se relacionarán los aprendizajes esperados y qué función tendrán en la valoración de los logros de aprendizajes. Esta etapa corresponde a la evaluación diagnóstica (se busca la valoración de los saberes previos, de los razonamientos espontáneos, de las actitudes y hábitos adquiridos por los alumnos).
La evaluación durante el desarrollo de la secuencia didáctica: las actividades a desarrollar deberán de ser acordes con el enfoque didáctico y las competencias de la asignatura. Dichas actividades serán adecuadas a los saberes que tienen los alumnos, a su nivel de desarrollo y de aprendizaje. En esta etapa se lleva a cabo la evaluación formativa, la cual dependerá de las evidencias para valorar a los progresos de los alumnos en el aprendizaje, los saberes nuevos que han conseguido, sus razonamientos y sus hipótesis o explicaciones, así como las estrategias que emplean para aprender. Para evaluar aprendizajes en esta etapa será importante centrarse en los procesos y en las estrategias que los alumnos utilizan al realizar las actividades que se les proponen. Con esta evaluación podremos adecuar estrategias didácticas, tomando en cuenta los errores de los alumnos para posteriormente utilizar estrategias de autorregulación que mejoren la calidad de los aprendizajes.
La evaluación al cierre de la secuencia didáctica: se valorarán los logros de los alumnos con la referencia a la situación de inicio y la final. Esta fase corresponde a la evaluación sumativa, la cual se centra en la valoración del logro de los aprendizajes esperados. Esta evaluación se puede llevar a cabo a partir de las evidencias reunidas a lo largo de la secuencia didáctica, considerando el producto final. Su análisis nos permitirá obtener un juicio.
En lo personal en cada proyecto que desarrollo considero diferentes instrumentos de evaluación que me permiten el desarrollo de competencias y adquisición de aprendizajes esperados.
En mi plan contemplo secuencias de inicio, desarrollo, y cierre y en todas manejo la evaluación con diferentes instrumentos.
Algunos de los instrumentos que más uso son: escala de rango, rúbricas, portafolio, lista de cotejo.
La escala de rango es la que más incluyo en el plan, en la cual considero una serie de indicadores que servirán al alumno para autoevaluarse en cada secuencia didáctica, ya sea de inicio, desarrollo o cierre.
La rúbrica y la lista de cotejo las uso para la heteroevaluación de productos finales; sin embargo, dependiendo de los productos muchas de las veces se las otorgo para que los alumnos se coevalúen en el desarrollo o en el cierre de una secuencia didáctica dependiendo el tipo de texto que generen.
Lo que más me agrada de evaluar a los alumnos en cada momento es que me dan resultandos cuantitativos y cualitativos confiables que en cierta manera me han permitido ajustar planes, estrategias, actividades e incluso en accionar oportunamente cuando un alumno se encuentra en peligro o en riesgo.
Indiscutiblemente es muy importante considerar la evaluación en nuestra planeación en todo momento (inicio, durante y cierre) de una secuencia didáctica, pues ésta impactará positivamente en nuestros resultados y en el desarrollo de competencias de los alumnos así como en la consecución de los aprendizajes esperados.
por Hernán de Luna Mora, 2015
REFLEXIÓN 5
LA FUNCIÓN PEDAGÓGICA DE LA EVALUACIÓN
La evaluación muestra parte del currículum oculto del profesorado; puede llegar a ser un eje vertebrador de todo el dispositivo pedagógico.
Si se quiere cambiar la práctica educativa es necesario cambiar la práctica evaluativa.
En países como Inglaterra e Israel, los cambios en el currículum han estado motivados por los cambios instaurados en las pruebas externas.
La evaluación pone al descubierto parte del llamado currículum oculto del profesorado. Planteamientos didácticos pueden ser discutidos cuando se observa qué y cómo se evalúan los aprendizajes promovidos.
Innovar en el diseño de unidades didácticas e innovar en evaluación son actividades inseparables que condicionan mutuamente.
La evaluación es la práctica pedagógica que menos motiva al profesorado y que más molesta; para el alumnado la evaluación es a actividad más temida y la menos gratificadora.
Alrededor de la evaluación gira todo el trabajo escolar.
Un buen dispositivo de evaluación debe estar al servicio de una pedagogía diferenciada capaz de dar respuesta a los intereses y dificultades de cada alumn@.
Un dispositivo pedagógico que contemple la atención a la diversidad debería de estructurarse alrededor de la llamada regularización continua de los aprendizajes. Regulación en adecuar procedimientos utilizados por el profesorado a las necesidades y progresos del alumnado.
La regulación debe ser un componente permanente.
La regulación continua se basa en tres estrategias didácticas: Evaluación considerada como regulación; autorregulación de los aprendizajes; interacción social en el aula.
Hay que reflexionar sobre qué y para quién evaluamos, sobre qué y cómo evaluamos, así como con relación a la manera de enseñar a los alumnos a autoevaluarse, es una de las tareas que enriquecen el trabajo colectivo en la construcción de un proyecto educativo.
LA EVALUACIÓN COMO REGULACIÓN
Toda actividad de evaluación es un proceso en tres etapas: Recogida de información; Análisis de esta información y juicio sobre el resultado de este análisis; Toma de decisiones de acuerdo con el juicio emitido.
La evaluación de los aprendizajes presenta dos funciones:
1. Una de carácter social de selección y de clasificación (pretende informar de la progresión de sus aprendizajes al alumnado y a sus padres, y a determinar qué alumnos han adquirido los conocimientos para poder acreditarles la certificación al terminar una unidad de trabajo, al final de un periodo o al final de un curso o ciclo escolar).
2. Una de carácter pedagógico, de regulación del proceso de enseñanza-aprendizaje, es decir, de reconocimiento de los cambios que se han de introducir progresivamente en este proceso para que todos los alumnos aprendan de forma significativa (aporta información útil para la adaptación de las actividades de enseñanza-aprendizaje a las necesidades del alumnado. Se inserta en el proceso de formación, ya sea en su inicio, durante o al final).
La evaluación no se puede situar solamente al final del proceso de enseñanza-aprendizaje. Hay diversas modalidades de evaluación caracterizadas por el momento en que se realizan y por el objetivo que persiguen.
EVALUACIÓN DIAGNÓSTICA INICIAL
Tiene por objetivo determinar la situación de cada alumno antes de iniciar un proceso de enseñanza-aprendizaje, para poderlo adaptar a sus necesidades.
Cuando la evaluación hace referencia a un colectivo se llama prognosis y cuando es una evaluación diferenciada se llama diagnosis.
La prognosis y la diagnosis del punto de partida de los estudiantes, es importante para el diseño de procesos de enseñanza-aprendizaje, pues debería posibilitar la modificación de las secuencias y la adecuación de las actividades para responder a las necesidades de los alumnos.
Esta adaptación es esencial en el proceso enseñanza-aprendizaje pues sustentaría bases sólidas.
La información que se recoja debería de permitir la exploración y el conocimiento, para cada alumno del grupo de clase:
Del grado de adquisición delos prerrequisitos de aprendizaje; De las ideas alternativas o modelos espontáneos de razonamiento y de las estrategias espontáneas de actuación; De las actitudes y hábitos adquiridos con relación al aprendizaje; De las representaciones que se hacen de las tareas que se les propone.
Halwachs dice, refiriéndose al alumno: “es un organismo activo y reactivo que a través de la enseñanza, pero especialmente a través de sus experiencias en la vida diaria, y sobre todo de la coordinación de sus acciones, se dota en cada estadio de su desarrollo de una estructura determinada en la que se insertan y organizan los conocimientos asimilados…Para dar una enseñanza que tenga un mínimo de eficacia es necesario explorar y conocer esta estructura de acogida tal como es y no tal como se ha pretendido que construyese”.
Estas estructuras se van construyendo a través de la enseñanza pero sobre todo a partir de las experiencias personales y bajo la influencia de la información vehiculada por los diversos medios de comunicación y del contexto sociocultural en el que se mueven los alumnos.
EVALUACIÓN FORMATIVA
Se refiere a los procedimientos utilizados por los profesores con la finalidad de adaptar su proceso didáctico a los progresos y necesidades de aprendizaje observados en sus alumnos.
Responde a una concepción de la enseñanza que considera que aprender es un largo proceso a través del cual el alumno va reestructurando su conocimiento a partir de las actividades que se lleva a cabo.
Este tipo de evaluación tiene como finalidad regular el proceso de enseñanza-aprendizaje para posibilitar que los medios de formación respondan a las características de los estudiantes. Pretende detectar cuáles son los puntos débiles del aprendizaje.
Desde el punto de vista cognitivo, la evaluación formativa se centra en comprender este funcionamiento del estudiante frente a las tareas que se le proponen. La información que se busca se refiere a las representaciones mentales de alumnado y a las estrategias que utiliza para llegar a un resultado determinado.
A través de los errores, se pueden diagnosticar qué tipo de dificultades tienen los estudiantes para realizar las tareas que se les proponen, y de esta manera poder arbitrar los mecanismos para ayudarles a superarlos.
La evaluación formativa pone el acento en la regulación de las actuaciones pedagógicas, por lo tanto, se interesa fundamentalmente más en los procedimientos de las tareas y no en los resultados.
La evaluación formativa persigue los siguientes objetivos: la regulación pedagógica, la gestión de los errores y la consolidación de los éxitos.
EVALUACIÓN SUMATIVA
Tiene por objeto establecer balances fiables de los resultados obtenidos al final de un proceso de enseñanza-aprendizajes. Pone acento en la recogida de información y en la elaboración de instrumentos que posibiliten medidas fiables de los conocimientos a evaluar. Tiene una función social de asegurar que las características de los estudiantes respondan a las exigencias del sistema; pero también puede tener una función formativa de saber si los alumnos han adquirido los comportamientos terminales previstos por el profesorado.
Un mismo instrumento puede ser útil para diferentes modalidades de evaluación, será la finalidad para la que se ha recogido y analizado la información la que determinará el tipo de evaluación que se ha llevado a cabo.
¿ES IMPOSIBLE APLICAR SISTEMAS DE EVALUACIÓN FORMATIVOS?
La responsabilidad de la regulación es esencialmente del enseñante.
Se debe buscar un equilibrio entre institución y la instrumentación.
Es necesario buscar estrategias didácticas alternativas que faciliten la autoevaluación por parte del propio alumnado.
Señala Perrenoud, si se quiere privilegiar la regulación durante los aprendizajes, será necesario sustentar las estrategias didácticas en dos mecanismos de regulación que no requieran la intervención del profesorado: LA AUTOREGULACIÓN DE LOS APRENDIZAJES Y LA INTERACCIÓN SOCIAL EN EL AULA.
Estas estrategias persiguen enseñar al estudiante a aprender para que adquiera autonomía en su proceso de aprendizaje.
LA AUTORREGULACIÓN DE LOS APRENDIZAJES
Cada persona tiene un sistema personal de aprender que ha ido construyendo progresivamente de manera autónoma a lo largo de los años.
Como elementos esenciales en el proceso de autorregulación aparecerán los siguientes:
*La comunicación de los objetivos y la comprobación de la representación que de éstos se hacen los alumnos.
*El dominio por parte del que aprende de las operaciones de anticipación y planificación de la acción.
*La apropiación, por parte de los estudiantes, de los criterios e instrumentos de evaluación del profesorado.
LA COMUNICACIÓN DE LOS OBJETIVOS Y LA REPRESENTACIÓN QUE DE ELLOS HACEN LOS ESTUDIANTES
Numerosos estudios han puesto de manifiesto que los alumnos que aprenden de manera significativa son aquellos que reconocen qué les pretende enseñar el docente y de qué manera lo piensa hacer. Si se quiere conseguir una enseñanza eficaz conviene que los estudiantes sean conscientes de lo que van aprender y del por qué se proponen unas determinadas actividades para facilitar este aprendizaje. Es necesario que cada alumno elabore una representación del producto final que se espera en cada una de las actividades, de los resultados que se pretenden alcanzar.
En primer lugar, es necesario que el profesor explique los objetivos que se proponen alcanzar en la secuencia que se inicia; por lo que el alumnado construirá la representación de estos objetivos. Para ayudar a los estudiantes se deberán planificar las actividades que faciliten la elaboración por cada alumno de una primera representación de las intenciones explicitadas por el profesor. Ello comporta que tengan un carácter simple y concreto, sean lo más manipulativas posible y estén cerca de los intereses y de la vivencias personales de los estudiantes.
Tienen un doble objetivo:
1. Situar al estudiante en los contenidos de los que se inicia el estudio.
2. Persiguen que cada alumno se pueda hacer una primera representación de lo que se quiere conseguir con el ciclo de aprendizaje que se le propone.
Al iniciar la secuencia cada alumno, según sus estructuras de acogida, pero también como consecuencia de las interacciones que se producen en el aula, interpretará de manera diferente el mensaje que el enseñante ha intentado transmitirle. El profesorado deberá de proporcionar la explicitación de estas representaciones para poder tener indicios sobre la divergencia entre su representación y la de sus alumnos.
Durante el proceso enseñanza-aprendizaje, el enseñante también modifica su representación inicial. El resultado de las interacciones que se dan en el aula, alumnado, profesorado van aproximando poco a poco sus representaciones. La manera de percibir los objetivos es cada vez más uniforme.
Es al final del proceso, si el aprendizaje ha tenido éxito, cuando la comunicación se habrá efectuado de forma satisfactoria.
Regulación = responsabilidad del enseñante, autorregulación = responsabilidad del estudiante.
Existe una negociación constante entre profesor y alumnado que es propiciada por la comunicación y lleva a acuerdos que persiguen mejorar la calidad de la enseñanza.
Es importante tener presente que sólo un número muy reducido de estudiantes son capaces de aprenderlos de manera autónoma.
LA ANTICIPACIÓN Y LA PLANIFICACIÓN DE LA ACCIÓN
La anticipación es como una predicción antes de llevarla a cabo, sobre el resultado que se obtendría si se realizase un acto concreto o sobre la importancia de seguir un camino para llegar al objetivo que nos hemos propuesto alcanzar.
La planificación es la elección de un orden determinado de realización que evolucionará y se modificará bajo el control de los resultados que se obtengan a lo largo del recorrido. Planificar implica combinar tres elementos: el objetivo, las acciones que le son propias y las condiciones internas de realización.
Si un alumno sabe anticiparse y planificar quiere decir que es capaz de representarse mentalmente las acciones que ha de realizar para tener éxito en la resolución de las tareas que se le proponen o en la aplicación de los conceptos y teorías aprendidas.
Es necesario proporcionar situaciones didácticas que faciliten a los estudiantes aprender.
El enseñante al ser experto en la materia que enseña, se olvide de esta necesidad del que aprende y no propicia situaciones pedagógicamente que lleven al aprendizaje de las diferentes acciones necesarias para realizar la tarea propuesta. Esto provoca que los estudiantes que no sean capaces de suplir esta laguna encuentren obstáculos considerables para alcanzar los objetivos.
LA APROPIACIÓN DE LOS CRITERIOS E INSTRUMENTOS DE EVALUACIÓN
El enseñante explicite las normas a las que se referirá para decidir si un alumn@ ha entendido un concepto, si ha sabido hacer un determinado trabajo y en qué grado, si conoce un cierto conocimiento o si su actitud es la esperada.
Siempre hay un grupo importante de la clase que no es capaz de prever ni los objetivos ni los criterios de evaluación. El profesorado debería comunicar estos criterios o normas a sus alumnos y comprobar la representación que de ellos se hacen. Es necesario prever situaciones de aprendizaje que propicien la aprobación de los criterios y de los instrumentos de evaluación por los estudiantes. Se ha constatado la efectividad de: la autoevaluación, la evaluación mutua y la coevaluación.
Son estrategias que constituyen otros de los elementos esenciales de un dispositivo pedagógico que estamos presentando. Para que un dispositivo pedagógico pueda incorporar como uno de sus componentes permanentes la autorregulación de los aprendizajes, será necesario que las unidades didácticas estén estructuradas en secuencias, que constituyan pequeños ciclos de aprendizaje, que permitan a los estudiantes adquirir un buen dominio de los contenidos pero también formarse al mismo tiempo que van adquiriendo seguridad en las operaciones de anticipación de planificación de la acción.
EL MARCO EN EL QUE SE PRODUCE LA REGULACIÓN CONTNUA DE LOS APRENDIZAJES.
Un dispositivo pedagógico que debería contener los siguientes componentes: evaluación diagnostica inicial; comunicación de los objetivos y comprobación de la representación que los alumnos se hacen de ellos; construcción del nuevo conocimiento y aprendizaje de los procesos de autorregulación, regulación y mecanismos de compensación; estructuración del nuevo conocimiento y aplicación a nuevas situaciones.
La evaluación es la pieza clave que ha de permitir reconocer en cada momento cuales son las dificultades que el alumnado encuentra en un proceso de aprendizaje y cuáles son las mejores estrategias para superarlas.
EN RESUMEN: UNA FORMA DISTINTA DE PENSAR SOBRE LA EVALUACIÓN
Cambiar los puntos de vista sobre la evaluación implica cambiar radicalmente muchas de las percepciones que se tienen sobre cómo enseñar para conseguir que los estudiantes aprendan.
Pensar en la evaluación como eje vertebrador del dispositivo pedagógico es poner el acento en uno de los elementos curriculares que más puede favorecer un cambio en la práctica educativa del profesorado y en el éxito de los aprendizajes.
En lo personal la evaluación es un término muy completo y amplio que no sólo compete a alumnos sino también a los docentes, se lleva al inicio (diagnóstica), durante (formativa) y al final (sumativa) que incluso debe de estar contemplada siempre en la planeación de un proyecto didáctico.
Así pues la evaluación contribuye en la mejora de aprendizajes; además, es un conjunto de acciones dirigidas a obtener información sobre el grado de apropiación de conocimientos, habilidades, valores y actitudes, que los alumnos aprenden en función de las experiencias provistas en clase y que por siguiente nos aportará elementos para la revisión de la práctica docente, mismos que se valorarán con la aplicación de diferentes instrumentos.
Por último la regulación será responsabilidad del docente y la autorregulación será responsabilidad del estudiante, mismas que impactarán positivamente en el proceso enseñanza-aprendizaje.
por Hernán de Luna Mora, 2015
REFLEXIÓN 6
EL DOCENTE QUE EVALÚA CON BASE EN EL ENFOQUE FORMATIVO
El docente: es responsable de crear experiencias interpersonales.
Los alumnos: deben convertirse en aprendices exitosos, pensadores, críticos y participantes activos de su propio aprendizaje.
Por lo que se espera que el docente:
*Sea un mediador entre el conocimiento y el aprendizaje.
*Sea un profesional reflexivo.
*Que examine su práctica.
*Tome decisiones y soluciones en problemas de su clase.
*Analice sus propias ideas.
*Promueva aprendizajes significativos.
*Brinde ayuda pedagógica.
*Ayude al desarrollo de competencias.
*Que su meta educativa sea promover la autonomía y la autodirección de los alumnos.
Así pues la enseñanza deja de ser un proceso de transmisiones de conocimientos (docente-alumno).
UN MODELO DE EVALUACIÓN CON ENFOQUE FORMATIVO
El modelo de Sheppard es el más aceptado de la evaluación formativa.
En el contexto del Plan y los Programas de Estudio 2011 se contempla:
*Aprendizajes esperados.
*Claridad de los conocimientos previos.
*Estrategias durante el proceso.
*Retroalimentación.
Momentos del modelo: Reconocimiento de los aprendizajes; Evaluación durante el proceso; Retroalimentación.
Claridad en lo que se enseña.
Los aprendizajes esperados: indicadores de logro en términos de temporalidad; definen lo que se espera del alumno: saber, saber hacer y saber ser.
Establecer y comunicar los criterios de evaluación.
*Comunicar: propósitos, actividades, tiempos y estrategias de evaluación.
Se espera que sean participantes activos y reflexivos.
IDENTIFICAR DÓNDE Y HASTA DÓNDE PUEDEN LLEGAR LOS ALUMNOS
Como llega el alumno (diagnóstico, conocimientos previos), como está (andamiaje, estrategias didácticas (zona de desarrollo próximo [nivel social-nivel individual])) y hasta dónde pueden llegar (objetivos).
RETROALIMENTAR A LOS ALUMNOS
Oportunidad para llevar a los alumnos a un nivel superior.
Para esto es importante no ofrecer elogios falsos, hay que ser claros y con base a criterios de evaluación.
La retroalimentación no debe de ubicarse al final, debe estar presente en todo el proceso de enseñanza-aprendizaje, en ambientes de confianza, crítica, constructiva y con opiniones fundamentadas.
Por lo tanto hay que identificar patrones de error e interferencias.
SUPERVISAR EL PROPIO DESEMPEÑO
Incrementa el compromiso y responsabilidad de los alumnos.
Aumenta la confianza del alumno.
Sirve para autorregular su proceso de aprendizaje.
LA ÉTICA EN LA EVALUACIÓN
Ejercicio profesional equilibrado. Consiste en tratar a los alumnos de acuerdo a las orientaciones y valores, asegurando que todos los grupos sean igual y escuchados durante los procesos de enseñanza-aprendizaje y evaluación.
Se da en 3 ámbitos:
*Individual
*Colectivo
*Material
La evaluación debe considerarse una medida conveniente para establecer criterios centrados en mejorar el aprendizaje, respetando su dignidad y protegiendo sus derechos.
por Hernán de Luna Mora, 2015
Más que reflexiones son una cátedra de todos los aspectos que debe dominar un docente para tener un buen desempeño en las aulas y en los procesos de enseñanza-aprendizaje. Lo felicito maestro Hernán. Y de verdad, me sirven para reflexionar sobre mi propio trabajo con mis alumnos.
ResponderEliminar